Ya se estrenó “El Gran Sueño”, el show de la familia circense más reconocida de Argentina. En su regreso a la ciudad tras diez años, está logrando cautivar a todos los espectadores que acudieron a la gran carpa castillo. El público podrá disfrutar de las funciones: el martes 30 a las 19; miércoles 1 a las 16 y 19; jueves 2 y viernes 3 a las 19; y doble función el sábado 4 y domingo 5 (a las 16 y 19).
La carpa de Servian, El Circo, se ubica en la Rotonda Francia (Parque Scalabrini Ortiz). Las entradas están a la venta en Ticketek y en boletería del circo.
“El gran sueño”, es una historia que entre secuencias circenses transmite un sentido mensaje sobre conciencia ambiental. Las primeras sensaciones de nervios en las funciones se viven con el número de equilibrio en alambre tensado; donde el ambiente de aplausos y presión se fue incrementando a medida que Lucas Servian fue sorteando peligrosamente obstáculos en altura. Entre coreografías y un mundo de odaliscas se presenta la impactante performance de Ailén Servian sobre trapecio sencillo. Aquí aparece el personaje oscuro de la historia y una puesta energética atrapante.
La intervención del clown rompe la cuarta pared en reiteradas oportunidades haciendo partícipes a los espectadores. La premisa de cuidar el planeta está presente en cada acto y se hace más fuerte en el gran número de acróbatas sobre piso con participación del total de los artistas en escena.
Los detalles de Servian, El Circo
En la gran carpa castillo, con diseño exclusivo del Servian y confeccionada por Canobbio Textile con lona de última generación, se crea la atmósfera perfecta para el desarrollo de esta historia. La tecnología lumínica y auditiva que acompaña cada acto, desde los payasos, los inquietantes trapecios en altura y hasta el momento clave en el que un ruido de motores se roba la atención. Por supuesto, todas las miradas se posan en la llegada de los motociclistas que, en la esfera del globo de la muerte, desafían las leyes de la gravedad.
A mitad de la función, los espectadores pueden disfrutar de las delicias del Candy Bar en la marquesa. También, sacarse fotos durante los veinte minutos de intervalo.
Se retoma la función y la pelea entre buenos y malos se va desenvolviendo en el transcurrir de los números. Payasos, malabares, palo chino aéreo y cama elástica encajan de manera perfecta. Con un despliegue coreográfico electrizante entra en escena la identidad argentina. Pisando fuerte y erizando la piel la fusión entre tango y acrobacias de saltos a gran altura marcan un hito.
El final de “El gran sueño” se transita con la explosiva performance de Royal Gauchos, la compañía de malambo creada exclusivamente en Servian, El Circo. Cuando todos siguen maravillados con las boleadoras llega el momento de la batalla final. De la cual participan todos los personajes.